Áloes
Hola de nuevo! Hoy vengo a hablaros de una planta por
todos conocida y es el áloe, cuando se habla de áloe, nos referimos al género Aloe sp., puesto que dentro de esta
denominación encontramos dos especies, Aloe
ferox y Aloe vera.
Estas plantas son perennes de hojas suculentas, lo cual
quiere decir que son gruesas, ya que guardan agua en su interior, algo propio
de plantas de lugares secos o muy secos. De echo se hacen plantaciones en
lugares desérticos, en España hay varios en Almería y las Islas Canarias,
principalmente Lanzarote y Fuerteventura que son las islas más desérticas.
Para diferenciar estas plantas lo más visible son sus
flores, ya que la especie A. ferox
son rojas y el A. vera son amarillas,
además de por el tamaño que la primera es mucho mayor que la segunda. También
vamos a encontrar diferencias en su composición química, en lo que respecta al
componente que le da sus propiedades laxantes, que será 18% en A. ferox o aloe del Cabo y un 28% en A. vera o aloe de Barbados. Este porcentaje
es del principio activo en un extracto del acíbar desecado.
Este componente laxante se encuentra en el acíbar de la
planta, que es el zumo que sale al cortar la hoja, la cual encontramos rellena
de un gel. Esos componentes se llaman derivados hidroxiantracénicos, hay varios
de ellos y el principal es la barbaloína, en la cual nos basamos para saber la
calidad de la planta y que debe de ser al menos de la cantidad que comentamos
antes. Del cual la dosis diaria sería de 10 a 30 mg.
Respecto de sus propiedades farmacológicas podemos
decir que es laxante o incluso purgante más o menos violento, según la dosis
administrada. Es un tipo de laxante estimulante, que no irritante. Este efecto
es debido a su acción en el intestino grueso, donde impide que se absorba el
agua por lo tanto la retiene en el intestino, junto con algunos minerales y eso
hace que se reblandezca el bolo, además de aumentar la motilidad por
estimulación de terminaciones nerviosas.
Por ello esta contraindicado usarlo en menores de 10
años, incluso no se recomienda en menores de 15 años y embarazadas, en mujeres lactantes,
no habría problema ya que el paso a la leche está muy reducido. A su vez no se
recomienda su uso más allá de los 10 días, ya que produce dependencia al
intestino, además su uso muy prolongado en el tiempo es tóxico para las células
del intestino.
Está contraindicado en personas que tomen digitálicos, diuréticos,
o cualquier medicamento que pudiera disminuir los niveles de calcio. También en
personas con obstrucción intestinal. Por último podría colorear la orina,
siendo rojiza.
Respecto del gel, no parece que tenga ningún componente
especial, son mucilagos, polisacáridos, glicoproteínas, etc. Que son
componentes normales que forman parte de cualquier planta. Aún así existen
estudios que tratan de comprobar científicamente sus propiedades cicatrizantes,
hidratantes, antiinflamatorias, principalmente.
La indicación como cicatrizante es la que ha hecho que
todos conozcamos el áloe y que lo ha hecho tan famoso. A nivel empírico se ha
visto una buena respuesta respecto a eccemas, y se ha detectado actividad
antiinflamatoria, antiviral y cicatrizante, además el gel por su propia función
de gel, gracias a sus mucilagos, es hidratante y emoliente.
Se han hecho estudios en pacientes oncológicos, ya que
se ha visto que se ha usado profusamente para mejorar las lesiones dérmicas
producidas por la radiación. Hay muchos estudios, y es algo confuso aunque
parece que si ayuda.
Lo que se está estudiando son las causas de que se den
estas propiedades y que realmente sea factible dichas propiedades. Ya que no
hay muchos estudios y no a todos les dan buenos resultados. Parece que los
polisacáridos estimulan de algún modo la síntesis de nuevas células que hace
que se regenere mejor la piel.
Esto es todo, espero que os haya sido útil, y hasta la próxima.
Un abrazo y gracias por leer!!!
Qué interesante y completo tu post!! A mi el áloe me gusta mucho como principio activo, tanto para faciales como para corporales me ha dado buenos resultados.
ResponderEliminarUn besazo!